El Grup La Pau es una cooperativa dedicada al transporte sanitario. Fue fundado en 1983 en Badalona y, desde sus orígenes, no ha dejado de mejorar sus estándares de calidad y de lograr adjudicaciones muy importantes en concursos públicos. En la actualidad presta cobertura a casi un millón de ciudadanos de las comarcas del Barcelonés Nord y el Maresme, y trabajan expandirse a otras zonas de Catalunya, a pesar de operar en un entorno incierto y muy dependiente de las finanzas de la administración pública.
Grup La Pau cuenta con una flota de 140 vehículos sanitarios y adaptados, y da trabajo a una plantilla de más de cuatrocientas personas, casi todas con contrato indefinido. Siempre fueron pioneros en capacitar a su personal, y a menudo les estudian las empresas de otros países como un caso a imitar. Frederic Torrent, su presidente, nos concede una entrevista para hablarnos del pasado, el presente y el futuro del Grupo.
“No tenemos a nadie trabajando como autónomo. Toda nuestra plantilla está en nómina”
“Actualmente damos servicio a más de ochocientas mil personas y optamos a prestarlo entre doscientas o trescientas mil más”
“Soy un defensor a ultranza de la sanidad pública. Pero en ciertos aspectos, las mutuas privadas ayudan a descongestionar el servicio público”
“Mi impresión es que la gente no abusa del transporte sanitario gratuito. Hay muchísimas personas que lo necesitan para ir a la rehabilitación todos los días”
“Yo creo que el sistema de transporte sanitario en Cataluña es de lo mejorcito que hay, ya no sólo en el resto de España, sino también fuera de nuestras fronteras”
Según leemos en la información corporativa del Grup La Pau, parece que en su historia reciente hubo dos momentos importantes. Momentos que les llevaron a convertirse en uno de los principales proveedores de transporte sanitario de la región…
Efectivamente. En el año 2000 vivimos un cambio importante, aunque el más significativo se produjo en 2006, con la separación entre los servicios de transporte sanitario urgente y de transporte sanitario programado. Logramos ser adjudicatarios del concurso lanzado por el CATSALUT (Servei Català de la Salut) para las comarcas del Barcelonès Nord y el Maresme. Y aquello nos hizo dar un salto cualitativo, en tanto que pasamos a doblar el personal (de 200 a 500 personas) y a triplicar los medios disponibles.
Y como organización que presta servicios para la administración pública, y encontrándose ésta tan afectada por la crisis y la falta de liquidez, ¿han podido seguir creciendo en los últimos años?
La verdad es que sí. Incluso en el 2008, manteniendo nuestra apuesta por el crecimiento, decidimos construir una nueva base, con más de 5.000 metros cuadrados de superficie, para las oficinas, el personal, el aparcamiento de nuestros vehículos…
Aunque seguramente, también por la crisis, habrán tenido que substituir al personal indefinido por personal autónomo externo…
No, no… En nuestra cooperativa los vehículos son nuestros, el personal es nuestro… No tenemos a nadie como autónomo y toda nuestra plantilla está en nómina, con alta en la Seguridad Social.
Eso es muy remarcable en estos tiempos… Ustedes llegaron a contar con quinientas personas trabajando… ¿Han podido mantener ese número de empleados?
Seguimos siendo más o menos los mismos. Lo que pasa es que el momento puntual en el que llegamos a ser 500 coincidió con una época en la que se ampliaba la población a causa de la estacionalidad del verano, etcétera. En la actualidad somos entre 430 y 450 personas. Prácticamente todos tienen un contrato indefinido. No tenemos a personal con contratos precarios, o con medias jornadas.
Ustedes siempre han destacado mucho por un esfuerzo en la formación de sus empleados…
Así es. Y estamos muy comprometidos con lo que se denomina la “Nueva Profesión”. Actualmente todo el mundo en nuestro sector tiene que recibir una formación y una titulación acorde. Es algo obligatorio. Y hemos establecido unos acuerdos con el Departamento de Ensenyament de la Generalitat, por los que todo nuestro personal va a recibir una formación profesional en un plazo de tiempo determinado.
Aunque en el pasado, reconocerá usted, se decía que la profesionalización del sector era baja. Tal vez eran otras épocas y tal vez había tanto trabajo que no existían suficientes profesionales en el mercado…
En el año 2006, nos encontramos con una avalancha de trabajo, sí. La verdad es que todo el sector tuvo que contratar a personas cuyo mínimo requisito es que tuvieran el carnet de conducir y un curso básico de socorrismo. A partir del 2006…
…se fue exigiendo cada vez más…
Así es. Nosotros ya estábamos acostumbrados a proporcionar una formación profesional, porque siempre hemos sido unos pioneros en eso. Sin embargo, es a partir del 2006 cuando en todo el sector ya se empieza a hablar de la formación profesional como un requisito. Hace tres años, el gobierno aprobó una formación profesional reglada. Antes, nosotros mismos les proporcionábamos la formación y nuestros empleados acudían a hacer un examen teórico-práctico al Institut Català de la Salut para conseguir el carnet TTS (Técnico de Transporte Sanitario), o el TES (Tecnico en Emergencias Sanitarias). Afortunadamente esto ya se da a través de la formación profesional reglada, por medio de módulos. En el plazo de uno o dos años tendremos a todos formados.
En estos momentos se empieza a hablar de cierta recuperación económica, aunque lenta. ¿Se han planteado retomar la senda del crecimiento?
Lo tenemos contemplado. De hecho, si bien estamos consolidados en el Barcelonès Nord y el Maresme, estamos ampliando nuestros objetivos y estamos planteándonos entrar en el Vallès Oriental, con Granollers a la cabeza. Actualmente damos servicio a más de 800.000 personas y en el Vallès Oriental hay unas 200.000 a 300.000 más. Es cierto que en el periodo estival la población de nuestra zona se multiplica por dos, pero contamos con una importante experiencia acumulada y podremos prestar los servicios necesarios en las nuevas zonas.
¿Seguirán ampliando el espectro de funciones del Grupo? ¿Existen aún ramas del negocio en las que se puede crecer?
Hace poco empezamos a realizar algunas prospecciones en el sector de las mutuas. De hecho ya estamos trabajando con la mutua más importante de España, que es MAPFRE. Y ellos están preparando un concurso al que nos vamos a presentar. Cada vez estamos trabajamos con más mutuas asistenciales y de trabajo. Así que estamos abriendo ese mercado.
Existe un debate importante que afecta hoy día al estado del bienestar. Se habla de si el sector privado es capaz de prestar, con mayor eficacia, el mismo servicio que el sector público. La Generalitat de Catalunya, y otras administraciones, ya están externalizando cada vez más. ¿Cuál es su opinión en este aspecto?
Mi punto de vista es bastante particular. Yo soy un defensor a ultranza de la sanidad pública. Sólo le diré que, cuando uno tiene un problema de verdad, acude en primer lugar a la sanidad pública porque es ahí donde están los medios, la tecnología, y el mejor personal médico, sanitario, etc. Sin embargo, reconozco que también soy cliente de mutua privada. Aunque creo que vale la pena acudir a este tipo de servicio sólo cuando uno necesita un análisis urgente o recibir una visita por algún motivo que no sea de gravedad. Las mutuas privadas, en ese aspecto, ayudan a descongestionar el servicio público…
…Es cierto. No es ningún secreto que la sanidad pública está muy masificada…
Veamos, sin ofender a nadie, yo puedo hablar de mi experiencia como profesional en la ambulancia, y lo cierto es que cuando te decían: “lleva este paciente a una clínica privada” en vez de, por ejemplo, al Hospital del Valle de Hebrón, me quedaba un poco más tranquilo porque sabía que en cuanto llegara atenderían al paciente al momento… Le podías dejar allí y no tenías ningún problema…
¿Hacia dónde orientará su crecimiento el Grup La Pau? ¿Buscará su futuro fuera de Cataluña?
La verdad es que las experiencias que hemos tenido fuera de Cataluña no han sido buenas. Tiempo atrás tuvimos una empresa en Madrid y otra en Fuerteventura. Esta última dedicada a servicios de bomberos y de vigilancia de playas… No funcionaron; de hecho seguimos con problemas: algún ayuntamiento nos debe mucho dinero… La dificultad está en que cuando hay tanta distancia no puedes llevar un control tan exhaustivo.
La verdad es que las experiencias que hemos tenido fuera de Cataluña no han sido buenas. Tiempo atrás tuvimos una empresa en Madrid y otra en Fuerteventura. Esta última dedicada a servicios de bomberos y de vigilancia de playas… No funcionaron; de hecho seguimos con problemas: algún ayuntamiento nos debe mucho dinero… La dificultad está en que cuando hay tanta distancia no puedes llevar un control tan exhaustivo.
¿Se abusa del servicio sanitario gratuito en este país? Es decir, ¿cree que hay más personas utilizando el transporte sanitario gratuito de las que en verdad lo necesitan?
Como tantas cosas, eso es relativo. Pero creo sinceramente que no. Piense que hay muchísima gente que tiene que acudir a servicios de rehabilitación todos los días. Uno puede decir: “¿este hombre podría ir en autobús?”; Y, sí, podría ir en autobús. Pero: ¿y si se cae?… Una persona que acude a rehabilitación es porque no está en su mejor momento de forma. Tal vez sufre una lesión… Y si esto sucede es muchísimo peor; la recuperación se alarga. Lo mismo sucede si vas a un centro de diálisis, y ves que un paciente es capaz de caminar por sí solo. Lo que no sabe la gente es cómo sale esa persona después de hacerse unas pruebas… Puede estar hipotenso, o le puede sobrevenir cualquier cosa…. Mi impresión es que no; que no hay abuso.
Por último, ¿cree que Catalunya es un caso de excelencia en el ámbito del transporte sanitario? ¿Está al nivel de otros países?
Tengo la deformación profesional de ir a ver cómo trabajan los demás en cuando salgo al extranjero, aunque sea de vacaciones. He visitado a los italianos. De hecho, también nos han visitado ellos a nosotros. Y hace poco también nos visitó una empresa sueca (“Samaritan”) y se quedaron muy sorprendidos de cómo trabajábamos (y seguimos en contacto con ellos). He visto trabajar a los ingleses, a los franceses… Y si no llegamos al nivel de la excelencia, nos faltan décimas. Yo creo que el sistema profesional de transporte sanitario en Catalunya es de lo mejorcito que hay, ya no sólo en el resto de España, sino también fuera de nuestras fronteras.
