Muerte al Spot

0
324

 Se abren nuevos caminos para la publicidad en los que el riesgo y la interacción con la persona y el espacio están a la orden del día. El marketing de guerrilla es el futuro, una estrategia que conjuga creatividad con rentabilidad, algo que a menudo escasea en los spots de televisión.

 

La publicidad, tal y como la conocemos, está en peligro de extinción. Muchos de ustedes arrugarán la ceja frente a mí sentencia y me parece lo más normal del mundo. Y más aún teniendo en cuenta las últimas cifras de emisión de anuncios publicitarios en televisión. Según informó Europa Press, en el mes de junio se emitieron en su conjunto un total de 257.454 anuncios publicitarios, un 10% más sobre el mismo período del año pasado. Si echamos cuentas, a diario se emiten 8.582 spots en televisión, de los cuales un espectador standard visualiza una media de 178 de ellos, según su consumo de pantalla y afiliación al zapping. A estos inputs publicitarios les hemos de sumar los carteles y vallas callejeras, los anuncios de la prensa, las falcas radiofónicas, la abrasiva publicidad de internet… 

Pese a esta avalancha de datos que ejemplifican que la publicidad es la pandemia de los medios, mantengo mi postura sobre que esta se encuentra en peligro de extinción. Es tal el bombardeo publicitario que recibimos a diario, que sin quererlo nos hemos hecho inmunes a él. Pocas campañas logran grabarse a fuego en la mente del consumidor y lo paradójico es que marcas completamente interiorizadas en la psique de las personas, como Coca Cola o Nike, son las que realizan las mejores estrategias publicitarias. Cierto que su potencial económico influye, pero aún así sigo en mis trece… El spot va a morir. Ni pegajosos jingles, ni lozanas figuras podrán salvarle por que el ambient viene pegando fuerte. 
El ambient o márketing de guerrilla es la nueva forma de promocionar un producto, que en Inglaterra ya ha comenzado a dar sus frutos. Con poco dinero pero con mucha cara dura se puede trascender a un nivel superior que cualquier spot y establecer fuertes vínculos empáticos con el consumidor. La cadena de automóviles Mini, inició una campaña de ambient que consistía en repartir miles de cajetillas de cerillas con mensajes picantes y un número de teléfono escritos a mano. Cuando la persona llamaba a ese número, saltaba un contestador que le invitaba a visitar la página web de la compañía. El boca a oreja y la difusión de la estrategia en distintos ámbitos de los mass media, como hecho noticiable, hacían llegar el mensaje al consumidor. Y todo ello de una manera natural y espontánea. Otra de las estrategias de la empresa fue “dejar olvidadas”  en los wc públicos, fotografías de las vacaciones que tenían un común denominador: en todas ellas aparecía el Mini. 
El secreto del ambient se basa en dos principios fundamentales de la teoría de la comunicación. Uno: ajustar milimétricamente en el punto de mira el target al que se pretende dirigir la campaña. Y dos: darle a esta masa objetiva lo que quiere, siempre buscando el equilibro entre alta creatividad a bajo coste. Optimización de recursos, que dirían en el mundo empresarial… Además el ambient cuenta con un aliado: el zapping. Si no tenemos ganas de ver anuncios siempre podemos cambiar de canal, en cambio todos estamos expuestos a una campaña de márketing de guerrilla.

Presston confía en las nuevas estrategias de comunicación y márketing. Las buenas ideas bullen y hay que ponerlas en práctica. Creemos en la exploración de nuevas vías que lleven a las empresas a la consecución de sus objetivos. Fidelizar, arraigar, crear marca e imagen… El ambient brinda todo esto. Sólo es cuestión de dar el paso. ¿Quiere que le ayudemos?

NULL

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Feedback se reserva el derecho de revisar los comentarios y despublicar en caso de no ser apropiados.