Las rutinas que implementó el confinamiento y las alternativas digitales a los encuentros sociales marcarán las Navidades de este año.
El escenario para la campaña navideña de este año será el más arduo al que las marcas y comercios de todo el mundo se van a enfrentar. La pandemia ha dibujado un panorama de incertidumbre económica con un perfil de consumidor completamente desconocido y un mercado dominado por el comercio electrónico. En este contexto, Amazon ha encargado a la compañía global WGSN un análisis de las expectativas y tendencias de consumo de los españoles de cara a estas navidades.
En principio; las claves que dejó tras de sí el Amazon Prime Day parecen coincidir con las predicciones sobre esta temporada; sin embargo, otros factores que competen a la nueva mentalidad de los ciudadanos y que han estado íntimamente relacionadas con el confinamiento van a resultar más determinantes de lo que pensamos. Esto se debe al componente emocional que impregna la Navidad: el sentimiento de familiaridad, el nuevo valor del hogar y la búsqueda del contacto emocional van a cobrar más protagonismo que nunca.
Entre los principales insights del análisis que vertebran esta idea, podemos señalar los siguientes:
1- Comunicarnos con nuestros seres queridosPor un lado, la tecnología será clave; especialmente en todo lo que concierne a mantener la tendencia de las “quedadas” o “reuniones” por videollamada para socializar. Por ello, productos como los altavoces bluetooth, las cámaras o auriculares repuntarán. La decoración del hogar con motivos Navideños y la personalización de las tarjetas de felicitación de Navidad también serán elementos importantes debido a la revalorización del “toque personal” y de la calidez de los escenarios para combatir la frialdad de la distancia.
2- Curiosidad infantil y juegos educativos: Greer Hughes, Mindset Consultant Director de WGSN, explica: “estamos viendo que aquellos recursos interactivos e inmersivos de entretenimiento educativo se convierten en un elemento básico tanto en los hogares como en los colegios”.
Por otro lado, los juegos de estrategia y lógica de grupo tendrán un repunte interesante como herramienta para combinar aprendizaje, ocio y entretenimiento en familia; una tendencia que se viene arrastrando desde el confinamiento con juegos como “Hijos vs. Padres”, “Cluedo”, “Virus” o “Monopoly”.
Los juegos de actividad física como el “Twister” o el “Ring Fit” de Nintendo también serán muy recurrentes por la creciente importancia de mantenerse activo dentro del hogar
3- Unas Navidades artesanales
Las manualidades son una forma de entretenimiento creativo y un regalo personal; dos factores con mucho valor en la situación actual. Entre lo más destacable podemos mencionar el creciente valor por la sostenibilidad (con lo cual los materiales reciclados serán los protagonistas) y el deseo por establecer conexiones de equipo a la hora de trabajar estas creaciones. Los productos más destacados serán los atemporales como edredones o álbumes de fotos.
4- Cocinar de forma más consciente
Según WGSN, “más del 50 % de los consumidores europeos cocinan actualmente en casa”. La cocina, además de haberse consolidado como una actividad de “ocio”, ha reformulado los intereses de los españoles: ahora, buscamos productos que ayuden a las defensas (probióticos y naturales) y todo lo que tenga que ver con la alimentación saludable. Esta tendencia incluso ha impulsado en un 32% el consumo de alimentos veganos.
De cara a Navidad, la tradición retomará importancia y recurriremos a productos nacionales populares como el vino o el Roscón de Reyes.
5- Ponerse en forma desde cualquier sitio
El deporte también es una moda que nació en cuarentena y que ahora forma parte de nuestra rutina; ya sea en el hogar o al aire libre. Las comunidades virtuales de ejercicio como sustitución al gimnasio han tenido un auge considerable (Fitbit, Garmin, Polar) y las venta de ropa deportiva en Amazon Fasion han aumentado un 130% este año.
Entre los productos con papeletas de triunfar están los auriculares weareables o las muñequeras con sensor térmico; además de toda la gama de gadgets para el deporte.
6- Cuidarse por dentro y por fuera
El self-care se ha convertido en parte esencial de nuestra rutina. Por ende, todos los productos que tienen que ver con la relajación, el bienestar físico y mental, el cuidado de la piel o la higiene en profundidad han aumentado su demanda. Todo apunta a una consecuencia del aumento de la preocupación por nuestro bienestar y nuestra salud.
Productos como los filtros de luz azul, para descansar la vista de las pantallas, y los remedios naturales para conciliar el sueño son algunos de los más populares; aunque también las cremas corporales y los dispositivos que mejoran nuestras experiencias diarias, como los pulverizadores de agua o los altavoces Smart.
7- Nuestra casa: el centro de todo
Nuestro hogar es ahora un entorno híbrido y flexible que aglutina multitud de funciones: oficina, gimnasio, comedor, escuela,… Por ello, decorarlo y reorganizarlo en base a una lógica de espacios es una necesidad de los nuevos consumidores.
Por otro lado, la tendencia de arreglarnos únicamente de cintura para arriba (con motivo de las videollamadas y el teletrabajo) ha propiciado un auge de los complementos y accesorios como pendientes o maquillaje de ojos.
8- Lo local, ante todo.
Esta Navidad conectaremos mucho más con la gente de nuestro alrededor y comunidad, como por ejemplo, con sus vecinos y pequeños negocios de barrio. De hecho, el interés de los españoles por los productos de comercio local ha aumentado un 45%. La clave estará en explotar esta tendencia tanto online como offline a la hora de las ventas.
9- Un sinfín de juegos
Los puzles, los juegos de mesa o las cartas han pasado de ser actividades de ocio de ocasiones especiales para formar parte de la rutina de muchos hogares. Del mismo modo, el gaming ha experimentado un crecimiento considerable, especialmente en España y concretamente en las modalidades de juego en grupo (multiplayer) con conexión virtual.
10- Contribuir a la comunidad
Las dificultades de la pandemia han cambiado mucho las perspectivas sociales; ahora valoramos más los pequeños gestos y muestras de apoyo o agradecimiento. Esto se traducirá en una tendencia a realizar donaciones o a ayudar a los más necesitados; en definitiva, un aumento de la solidaridad y un crecimiento de la simpatía hacia diversas ONG
